jueves, 30 de junio de 2011

TIERRA SAGRADA

Por lejanas praderas..galopa una voz en una nube
es canto del pájaro solitario..copa del árbol
que emerge en el bosque..vigía de los tiempos..
resuena tu voz de pluma águila..de luna que vuela planicie..
montañas  desfiladeros vírgenes quedaron en tus ritos 
guardados...suenan tambores en manos de tus antepasados.
Colores de la tierra prometida en tu cara..brillan bajo el Sol..
pieles y fuego marcan el pasado..el humo elevando señales..
ríos puros  búfalos caballos lobo de la noche de las lluvias
ritos pipas y la vida dibujada en el horizonte perpetuo de tu raza.

Navegamos los tiempos en tu cantar...que lleva al gran cielo

cobijo de los espíritus..que emigraron a otras tierras sagradas..


sábado, 25 de junio de 2011

Zingcé Chi Uan.

   Tiempo aproximado de lectura  2 minutos 55 segundos
  Caminaba apurado rumbo a la estación a tomarse el tren que lo llevaría rutinariamente a su trabajo
    Las calles estaban desérticas  apenas marcadas  por la bruma matinal espesa y opaca. Siluetas de casas oscuras recortadas por la tenue luz del amanecer; árboles casi blancos de agua nieve; frío intenso, movido por el viento, le calaba  la cara. Sus manos buscaban el refugio tibio de los bolsillos del pantalón. Gris a su alrededor, gris el cielo. Lloviznas intermitentes que hacían apurar el paso. Alguien frente a él se acerca en sentido contrario, viene lejos aún, y  apenas si su silueta oscura se diferencia del paisaje. Pasa demasiado rápido y  le roza el brazo,  pronunciando palabras, palabras que quedaron allí por un instante suspendidas en el aire. Eran las palabras que había buscado últimamente en sí mismo sin poder encontrarlas, que había perdido, palabras mágicas que repetían sus palabras que creía  que solamente él había encontrado en la China milenaria  talladas en piedras enterradas, y perdidas en los bosques a orillas del Yang Tsé Kiang, río azul, que nace en el Tíbet, y que yacen allí aún intactas para que alguien las vuelva a descubrir.
    Aquellas palabras solo guardadas en él, y que había perdido, ahora estaban en su lugar nuevamente. Sus labios susurrando las repetían una y otra vez como queriendo grabarlas  de una vez por todas y no se le  escaparían.
   Y ahora, con toda su sorpresa,  allí estaban dibujadas nuevamente en su mente, sentidas en su alma, pronunciadas repetidamente por sus labios.
   Giró tratando de ver a ese desconocido que ya no estaba, había desaparecido en la distancia.
   Volvía a pronunciarlas y el cielo se abría, los árboles estaban florecientes y llenos de trinos en un instante, las calles tenían colores, se llenaban de personas, el aire se hizo tibio y el sol acariciaba con su luz. Siguió repitiendo las palabras, su mente rebozaba de pensamientos positivos, su corazón, hasta hace un rato vacío, volvía a latir de sueños y esperanza. Se volvía a dibujar en su alma el rostro del amor.
  Sus pasos cambiaban de rumbo, ya buscaban otro refugio: el de su hogar. Sus movimientos tenían vitalidad,  erguía el cuerpo. Los sentimientos se hacían luz en él...
   Allí a pocos pasos la casa blanca, casa colonial, rodeada de palmeras y casi cubierta de enredaderas. Atravesó corredores iluminados, silenciosos y brillantes de cera. De la vitalidad agresiva de afuera no llegaba hasta allí más que una masa indiscernible de sonidos apagados. Tocó la puerta y se abrió. Entró. Sus hijos y la esposa amada sonriendo felices lo abrazaban y sonríen. Los viejos sillones de estilo, los dibujos, las esculturas, los cofres de cuero y las cajas de porcelana estaban allí en su lugar intactos, dándole la bienvenida, con ese color que da a las cosas el mucho tiempo y el cariño. Su corazón pletórico de amor por todo se desbordaba.
   Como si no hubiese otro espacio de tiempo entre aquella felicidad y otro pasado, comenzó una nueva vida sin recuerdos, sólo vivir y sentir. Pero las palabras que habían vuelto a él, recordadas por un desconocido que se había cruzado en su camino, de repente se empezaron a borrar de a una, se confundían con otras, desaparecían.
  Ante el esfuerzo de buscarlas en el pasado que no existía, le pareció, por un instante, estar en un lugar en donde nadie podía entrar ni salir  ni atravesar sus paredes blancas y acolchonadas. Tomó su abrigo como siempre, sabía que en un rato se iría a la estación a tomarse el tren...

martes, 21 de junio de 2011

FUE ANOCHE...

Duración aproximada de lectura: 2 minutos 12 segundos.  
Había pensado por horas y horas, que todo lo logrado en la noche de ayer podía ser el principio de una nueva vida. Sus ojos no soportaban más las paredes descascaradas, ni aquel pedazo de cielo que  esquivando  vidrios sucios, apenas le llegaba por la claraboya. Recluido en el pasado no podría ni siquiera sobrevivir, tendría que abrirse a un nuevo mundo, y allí,  desde anoche, estaba en su mente límpido, fragante, prometedor.

Necesita descorrer la cortina y ver la ciudad a sus pies; levantar el teléfono y que alguien lo tratara de Señor. El juego empecinado se había terminado. Aquel tapiz de un verde desgastado sería olvido entre números esquivos. Los caballos solo correrían en sus cuadros grises que mostraban la gloriosa incertidumbre de un final, que inclinados le enseñaban el mal camino. Las barajas de poker volaban lejos, se iban de su vista. Sintió sobre su piel por primera vez el placer de la dicha, el placer de una ilusión, de ser reconocido. Era demasiada la promesa para ser una mentira más. Se embarcaría de lleno en esa aventura para salir, para ir a buscar a Anna que dormía en su mente y en su corazón esperando. "Siempre te esperaré".  Le había dicho ella cuando él partió hacia la gran ciudad. Quería traer aquel pasado con  Anna al presente, y ahora lo veía al alcance de su mano
Una lámpara alta dejaba caer una luz amarillenta sobre la cama y sobre una mesa llena de recortes de diarios, donde mutilaba su pasado sin gloria. Por un instante había salido y dejado la puerta entornada. Bajó  las escaleras a paso rápido, la balaustrada con remate en  madera dura le quemaba la mano, le gustaba aquella sensación que subía por su brazo. Salió a pleno sol. Su cara tomó una sonrisa de la luz mañanera. Se alejó pletórico hacia el abasto de carnes. Compraría un buen filete, un buen vino, y sería la despedida de aquel rincón oscuro perdido en un edificio que los años habían dejado en ruinas como a él. Pero su ánimo no concordaba con las pocas reservas monetarias de sus bolsillos. Apenas unas monedas inservibles jugaban en sus manos.
Allí,  frente a él,  lo que sería su último acto en contra de su renovada voluntad.
Por qué la oportunidad se filtra hacia uno, cuando uno ya no la necesita. Se repetía.
Tenía que despedirse a lo grande  de aquel mundo gris y desesperanzador, un último golpe y la despedida sería completa. Después simplemente esperar la llamada, punto final a un mundo lleno de peligros, oscuro, que solo dejaba rastros inseguros. Caminaba erguido; de entre sus ropas sacó un filoso cuchillo y lo apoyó en el cuello de una temerosa mujer que distraída era presa fácil. Pocas palabras y ella entregó su cartera. Corrió entre la gente que le vociferaba. Más distancia ponía de su última fechoría y menos corría.
Sus pies se detuvieron  en la entrada de un callejón. Sacó la cartera de dentro de sus ropas, la destripó y la arrojó dentro de un tanque humeante. Contó los pocos billetes, y salió con paso seguro.
Ya no pensaba en la noche de ayer. El giro de unos dados lo pondría en su lugar definitivamente.


domingo, 19 de junio de 2011

Quémame


Tus deseos se abren frente a mi.
Mis ojos cerrados te alcanzan

con sueños despiertos.

No dejes que tus labios sufran de amor
mójalos..deja que digan su querer
que solos no viven.

Quémame con tu mirada;
atraviésame el alma
mientras muero..
en tus brazos en calma.

jueves, 16 de junio de 2011

Tenue luz

Arrancaré la noche de tus ojos..
pondré tenue luz a tus deseos..
seré la tibieza de un recuerdo
recostado a las paredes de tu soledad..
beberé yo el trago amargo de tus lágrimas..
daré dulzura a tus palabras libres..
diré tu nombre para despertar al día..
y veré tu sonrisa colgada de mi ventana
con cara de luna y alma apasionada..

viernes, 10 de junio de 2011

Nuestros deseos

 
Bebo la magia
del fruto de tus lamentos..
me adentro a tu desierto
para bañarlo
de mar fresco..
navego en luces
que atraviesan
los azules cielos..
caigo en la red
de tus sueños..
busco tu universo..
en tus labios rojos..
impávido bajo mis alas
y detengo mi vuelo..
frente a frente tú y yo..
y en el silencio

de tus ojos y los míos..
se desnudan una y otra vez..
nuestros deseos.

domingo, 5 de junio de 2011

Caminante.


Como si fuera en el ocaso
por una vereda  oscura..
así siento mi sufrimiento..
pero siempre siento a mi costado..
una protección que me sostiene
y me eleva sobre la vida.
Andar por el sendero
sin tropiezos..sin miedos..
pensando en el ayer tan hermoso..
que me trae tantos recuerdos.
como si fuera él que me dirige
con fuerza en esta soledad.
En este silencio del final
ha pasado mucho tiempo.
pero el tiempo es corto
parece un camino muy corto
que se vuelve angostura al pasar..
o serán los pasos nuestros
ya sin fuerzas de tanto andar.
Camino que tantos han recorrido
pero que  no nos puede contar
quedaron en su recuerdo..
silencioso misterio del caminante
que ya no pasará nunca más..

jueves, 2 de junio de 2011

Marilyn Monroe Cumple 85 años y sigue igual.

LA POSTERIDAD LE HA PAGADO CON ETERNA JUVENTUD.


Dónde están esas gaviotas que vuelan por 
         siempre sobre tus ojos
Dónde tu pelo rizado..tu sonrisa de niña..
          el lunar único..tu boca de fresa
Dónde ..dónde Marilyn..tus pestañas 
          en estado  de sueño..
Dónde tu piel blanca fría palpitante..dónde 
           tu voz rozando las melodías del cielo
Dónde tu imagen por siempre..tu aroma 
           Chanel 5..aquellos pasos de vampiresa.. 
Dónde mujer ideal..figura y alma..
           que  nunca más será amada...